EL SEÑOR ARZOBISPO BENDICE EL PENDÓN DE LOS BELENISTAS
El domingo 12 de octubre por la mañana la catedral de Tarragona se llenó dos veces por una multitud de personas deseosas de asistir a las celebraciones eucarísticas que presidió el Señor Arquebisbe.
La primera reunió a más de mil personas, 400 de las cuales formaban parte del peregrinaje jubilar de los belenistes de Cataluña y de Baleares que se reunieron en la seo para rendir homenaje a san Fructuoso, obispo, y a san Augurio y san Eulogio, diáconos.
En su homilía, Mons. Jaume Pujol felicitó, en el transcurso de su bonita homilía, a los belenistas por su hermosa tarea, diciendo que «llevan a Jesús a todas las casas». También los animó a continuar con esta actividad, la cual constituye una verdadera catequesis. Igualmente manifestó que esta tradición, tan arraigada entre nosotros, debería ser propagada, ya que –como hiciera ya san Francisco de Asís, el primer pesebrista- era una forma de acercar a todo el mundo el misterio de un Dios que nos ama tanto que aceptó encarnarse y fue igual en todo a nosotros, menos en el pecado. Igualmente tuvo un recuerdo para la Asociación Pessebrista de Tarragona (APT), la cual celebra este año el 80º aniversario de su fundación, y manifestó su gratitud por el belén que cada año construyen en la Catedral.
Al acabar la celebración eucarística, el Señor Arzobispo procedió a la bendición del pendón de la APT y también a sus pequeñas portadoras. Una cinta bordada conmemorativa fue entregada al prelado, el cual agradeció el detalle con muestras de viva satisfacción.
